Túnez: Entrevista con secretario general del sindicato de la enseñanza primaria, UGTT

El Sr Hafaiedh Hafaiedh, secretario general del sindicato de la enseñanza primaria

“Solo defendiendo la justicia y el progreso puede existir la UGTT”

Pregunta: La Comisión Administrativa acaba de votar la aceptación del gobierno Ghannouchi, con dos ministros de las filas del antiguo régimen, incluido el propio Primer Ministro. ¿Qué piensa de esta nueva situación? ¿Cuál es su valoración con respecto a esta nueva situación?

Respuesta: La posición adoptada ayer es la de la organización. Ha sido tomada por la Comisión Administrativa de la UGTT, que es la tercera instancia de decisión del sindicato. Quiere decir que el punto central de la discusión en la Comisión Administrativa fue: ¿Acepta la UGTT ratificar los resultados de las negociaciones que mantuvo con el gobierno en lo que concierne a la formación del gobierno?

Hay que recordar que la Comisión Administrativa de la UGTT reunida el 21 de enero ha hecho una declaración que dice clara y rotundamente que no acepta ni reconoce ningún gobierno que integra en sus filas a miembros del antiguo régimen. Pero después de estas negociaciones la UGTT ha aceptado la posibilidad de que se puedan mantener dos ministros del antiguo régimen que estuvieron en el gobierno de Ben Ali,  el propio Primer Ministro incluido. Y esta propuesta ha sido admitida por una gran mayoría de la Comisión Administrativa de la UGTT.

En lo que me concierne, como representante del sindicato de la enseñanza primaria, juntamente con el sindicato de secundaria, la federación de correos, el sindicato de los médicos de la salud pública, el sindicato de la juventud y de la infancia, la unión regional de Sfax, la unión regional de Bizerte y la unión regional de Jendouba, hemos votado en contra, de acuerdo con la reivindicación expresada por la clase obrera en su conjunto por medio de sus movilizaciones. Hemos dicho que no aceptamos ninguna modificación de la línea adoptada por la Comisión Administrativa del 21 de enero.

Todos estos sindicatos, como la unión regional de Sfax, con un enorme peso en la UGTT, la unión regional de Bizerte, bastión obrero e industrial, y la unión regional de Jendouba, que desde hace mucho tiempo está en sintonía con el movimiento de la clase obrera tunecina, representan más del 50% de los militantes de la UGTT que se niegan a reconocer este gobierno. Es decir que la mayoría de los sindicados están en una postura clara y conforme con la declaración de la Comisión Administrativa del 21 de enero. Y hoy la UGTT acepta reconocer este gobierno constituido por Gannouchi. Es una contradicción que necesita un examen muy serio.

Hay que saber que todas estas fuerzas sociales – el sindicato de la enseñanza primaria  representa a 50 000 sindicados, el de la enseñanza secundaria más de 55 000, la federación de correos que es también potente, el sindicato de los médicos de la salud pública, el sindicato de la juventud y de la infancia, la unión regional de Sfax que cuenta más de 50 000 sindicados, la Unión regional de Bizerte, muy numerosa también, y la unión regional de Jendouba – tendrán un peso enorme en la batalla que sigue a todos los niveles de la UGTT para obtener que sean apartados del gobierno los representantes del antiguo régimen.

Sabemos que toda la clase obrera se niega a reconocer el gobierno Ghannouchi, que considera como la conservación del régimen de Ben Ali y de sus cómplices, de su banda. Decimos que el reconocerlo, en verdad, es reconocer que la UGTT acepta que sus principios, las aspiraciones y las reivindicaciones para las que ha venido la revolución surgida en nuestro país sean empaquetados, embalsados.

Pregunta: A través de todas las iniciativas que cada día se toman en todo el país, la movilización del pueblo se concentra en un lema: « ¡Fuera Ghannouchi! ¡Fuera el RCD!» ¿En tu opinión cual es la vía que permitiría que la clase obrera, que la juventud, que todo el pueblo tunecino oprimido desde más de dos decenios haga escuchar su voz?

Respuesta: En efecto, la UGTT es una organización que sigue las reglas de la democracia. Pero digo claramente que cuando se trata de cuestiones de principio, de cuestiones fundamentales que directamente abarcan los objetivos de esta organización sindical, no es posible que sea reducida la democracia al voto en el marco de la Comisión Administrativa, porque más de la mitad de las fuerzas de la UGTT lo dicen claramente: es inaceptable que un gobierno cuente en sus filas con ni un solo miembro del régimen antiguo. No es una cuestión de democracia, es una cuestión de principios básicos que determinan la existencia de la UGTT como organización independiente de la clase obrera de nuestro país. Hoy se presenta así la situación: somos una mayoría en la UGTT para exigir esto, pero somos la oposición. Nuestra exigencia es la de la mayoría de los sindicados, pero somos la oposición.

Esta en claro que hoy expresan la reivindicación primordial del pueblo tunecino. ¿De qué manera su voz, la voz de todas las fuerzas sindicales que militan a favor de la ruptura con el orden antiguo y por la salida de los dos ministros del RCD, pueda hacerse eco en la UGTT de esta reivindicación?

Si, es cierto, representamos la mayoría en la UGTT, porque se debe saber que en la Comisión Administrativa, la voz de nuestro sindicato de 50 000 sindicados, como la del sindicato de la enseñanza secundaria que cuenta con más de 55 000, equiparan a un sindicato de solo 700 o 800 sindicados.

Ahora la palabra pertenece a la movilización, a las manifestaciones, a la calle, a las huelgas. Los profesores de primaria han hecho dos días de huelga el 24 y el 25 de enero; una huelga que momentáneamente suspendemos. El gobierno y los medios a sus órdenes llevan una campaña encarnizada para intentar oponer a los padres contra los profesores de primaria. Momentáneamente hemos decidido de parar las huelgas y por hacer entender que tenemos los mismos intereses, en todas las escuelas organizamos asambleas docentes-padres. 

Y seguimos nuestro combate hasta la caída del gobierno. Hay que entender que el profesor de primaria está determinado a ganar porque está profundamente por la democracia, por el progreso, y no está en el campo de los manejos elaborados por los unos y los otros en Paris, Londres, o en otro lugar. Hay que saber que los sindicalistas son los herederos de Hached y de M’Hammed Ali el-Hammi, quiere decir de los demócratas llenos de los principios de progreso, de justicia y de libertad. La UGTT ha sido creada y solo puede existir defendiendo estos principios, como fue el caso en la batalla por la independencia, y en 1977 en la víspera de la huelga general de enero de 1978.